La gran mayoría de maquinistas de Metro de Madrid no finalizan su jornada laboral donde empiezan, suponiendo una pérdida de tiempo diaria. Si además trabajan a turno partido, ese tiempo malgastado se multiplica. Sin embargo, a pesar de que en 2023 todo esto cambiará, a muchos les cuesta ver la luz al final del túnel. Tras una entrevista mantenida con algunos compañeros que actualmente tienen ese turno, han querido compartir su opinión respecto a esta situación.

El turno partido, que supone la división de la jornada laboral en dos partes, suele hacerse para aprovechar de mejor forma el esfuerzo de los empleados, pero implica una enorme desventaja: parte la jornada del trabajador haciendo que este tenga que hacer dos viajes ida-vuelta al trabajo en un mismo día. En el caso de los maquinistas con jornada partida, el tiempo libre que hay entre el primer y segundo turno es de 3 horas y 30 minutos; sin embargo, al tener que desplazarse desde la estación en la que finalizan su jornada a su casa y tener que volver, el tiempo real de “descanso” se reduce considerablemente.

Por lo tanto, si comienzan, por ejemplo, en Casa de Campo (final de la línea 5) nunca se va a terminar en esa estación u otra cercana, sino todo lo contrario, llegando a perder más de una hora en ir de una punta a otra. Además, hay que sumar el cambio de turno con el otro compañero y el tiempo que se tarda en fichar. Algunos maquinistas aseguran que pierden hasta 2 horas y media en terminar su turno y regresar a casa, aunque todo depende de la longitud de la línea.

Es cierto que se recibe un complemento por este turno, concretamente de 9,72 euros durante una jornada de 7,5 horas mientras que, aquellos que tienen jornada continua de 7 horas disponen de 30 minutos de descanso, pero no reciben ningún dinero extra. ¿Compensa, por tanto, ese incentivo para quienes tienen jornada partida? Algunos opinan que mejor eso que nada, mientras que otros no lo llegan a considerar un beneficio ya que pierden muchas horas en el día con el simple hecho de regresar a su casa y volver entre un turno y otro.

Los compañeros con jornada partida llevan mucho tiempo pidiendo que se termine donde se empieza. Aunque esta situación también afecta a los maquinistas que tienen jornada continua, no se puede comparar los perjuicios con aquellos que ven esa pérdida de tiempo por partida doble al tener que ir y volver dos veces en el día.

En 2023 se hará efectivo finalizar donde se empieza 

En el transcurso de la negociación del Convenio Colectivo, se alcanzaron determinados acuerdos y preacuerdos sobre asuntos y medidas que afectan a los distintos colectivos de trabajadores de Metro de Madrid, como la implantación de un nuevo sistema organizativo, a partir de la entrada en vigor de los cuadros de servicio de 2023, para que los maquinistas finalicen su jornada de trabajo en la estación donde ésta haya comenzado, o en la más próxima al depósito o cochera en que, en su caso, la hayan iniciado.

Para algunos maquinistas este preacuerdo no supone un rayo de esperanza, ya que implica esperar un año más a que entre en vigor, pues en un principio se esperaba que fuera efectivo en 2022. Otros piensan que terminar donde se empieza será un beneficio principalmente para la gente veterana, que pueden elegir el lugar de entrada.

Por otro lado, esa compensación económica que han estado recibiendo los turnos partidos no desaparecerá, sino que, además, percibirán un ligero aumento, pasando a ser 10,07 euros al día.

Incentivos que pueden motivar la situación actual 

Como hasta 2023 hay que sobrellevar este escenario tan insostenible, algunos maquinistas plantean diversas soluciones que, al menos, motiven a ejercer el turno partido aún terminando en un lugar diferente de donde se empieza. El objetivo es incentivar que sean más atractivos, ya sea económicamente o con otro tipo de libranzas.

Es comprensible que haya un complemento en este tipo de turnos pero, teniendo en cuenta el tiempo que se pierde, quizás se debería de incrementar mucho más esa cantidad como se hace con los N11 o N12. 

Otra opción es que, además del complemento por turno partido, se debería dar otro por la media hora más de trabajo en comparación con aquellos que hacen los turnos seguidos.

Por último, plantean que, además de las rotaciones mínimas estipuladas en cada línea, según horario y periodo estival, les gustaría coger el tren cuando les toca y no cuando el técnico lo establezca, porque aseguran que a los maquinistas con turno partido les obligan a que coger el tren antes que los que tienen la jornada continua.

En cierto modo, parece que no se trata de manera igualitaria a ambos turnos, habiendo posibles favoritismos en el trabajador de jornada completa frente al de jornada partida, según explican algunos compañeros.